Sama’ Abdulhadi, una figura emblemática de la música electrónica, inició su relación con el arte de mezclar en 2006, en la vibrante pero desafiante ciudad de Ramallah, Palestina. Aunque comenzó su carrera influenciada por géneros como el hip hop y el rap, su destino musical cambió al llegar a Beirut, donde descubrió y se enamoró del techno. La escena nocturna libanesa, llena de energía y creatividad, moldeó su estilo, una mezcla única de techno, house y otros subgéneros de la música electrónica. Sama’ describe su sonido como “Techno berlinés, pero lo percibo a la manera libanesa”, un reflejo de su identidad cultural y su visión artística.
Nacida en Jordania en un contexto de conflicto y crisis, Sama’ ha sido testigo y víctima de la violencia desde temprana edad. Uno de los momentos más decisivos de su vida fue el ataque a su hogar en Palestina por parte de tropas israelíes cuando solo tenía 10 años. Esta experiencia, lejos de quebrantar su espíritu, alimentó su activismo y su compromiso con las causas sociales, luchando contra la guerra y la injusticia que millones de personas enfrentan a diario. Con el apoyo incondicional de su familia, Sama’ se graduó en el Reino Unido en Ingeniería de Audio y Producción Musical. Su talento y pasión la llevaron a trabajar como diseñadora de sonido para cine en El Cairo antes de regresar a Palestina. De vuelta en su tierra natal, se convirtió en una fuente de inspiración para la escena underground local, apoyando a artistas emergentes a través de iniciativas como Union, una comunidad artística en Ramallah, y Awyav, su agencia de representación de artistas independientes.
El punto de inflexión en su carrera llegó en 2018 con su sesión en vivo para Boiler Room desde Ramallah, que hasta la fecha ha acumulado más de 13 millones de vistas. Este hito la catapultó al reconocimiento internacional, convirtiéndola en la primera DJ y productora palestina en tocar en escenarios de renombre mundial como Coachella, Glastonbury, Circoloco, y muchos más. México también ha sido testigo de su talento. Sama’ ha actuado en clubes en Tulum y dejó una huella imborrable en el Carnaval de Bahidorá hace un año. Su conexión con el público mexicano es tan fuerte que el próximo 4 de octubre regresará para presentarse en Supremo, prometiendo otra actuación inolvidable.